lunes, 29 de noviembre de 2010

Bolsas que explotan, Dimitris en potencia y mi gato Joaquín Sabina

Antes de empezar con todas mis tonterías, me gustaría recordar desde este humilde rinconcito de internet al que fuera un genio del humor, Leslie Nielsen. Gloria allá donde estés.

Esta entrada la escribo desde clase. ¿Y qué tiene eso de importante? Pues que no es mi clase... Aquí me hallo, en última fila junto al hombre que me ha hecho dar el paso hacia este sufrimiento. Me explico: he llegado tarde, para variar, entonces cuando he intentado entrar por primera vez he visto que había otra profesora pero los mismos alumnos. Asustado por la situación me he dejado llevar por el pánico y he cerrado la puerta. Dos minutos después ha aparecido un compañero de clase, al que le he preguntado que dónde era la clase hoy. Tras asomarse al aula me ha dedicado un gesto de aprobación, por lo que también he entrado. Una vez sentados me ha dicho que las profesoras se han cambiado el horario esta semana, justo esta semana. Así que tendré que esperar a que la profesora haga una pausa para volar de aquí, aunque lo que realmente me gustaría hacer sería salir pitando de la clase mientras hago el baile de Dimitri...

Por cierto, desde mi posición al fondo de la clase puedo atisbar las webs donde se meten los alumnos durante la clase. Justo delante de mí hay un par de chicas mirando botas en internet mientras navegan por Facebook; delante a la izquierda hay un chaval que está jugando en el casino online (no sé si con dinero o no, pero apunta cosas en el cuaderno a la vez); y más adelante hay una chica jugando al juego de juntar bolas de colores, amén de otro par de estudiantes que tienen el Word abierto...

Continúo, ¿os he hablado de la estupidez humana? Aparte de metiéndose en clases ajenas, una persona puede demostrar su poca destreza mental de diferentes maneras. Aquí os adjunto una definición gráfica y una explicación de lo ocurrido. El miércoles fui a sacar la basura por la noche porque el camión pasaba al día siguiente. La bolsa estaba más 'petada' que los pantalones de Falete, casi teníamos que grapar la mierda a la bolsa para que no se derramara. Además, atisbé un pequeño agujero en la parte inferior. Por tanto decidí sacar otra bolsa para meter la antigua en la nueva y poder llegar sin peligro al contenedor. Bueno, pues fue sacar la bolsa de la papelera y ocurrió. Sí, amigos, derramé toda la mierda de la semana por el suelo del 'salón'. Tras contemplar la situación atónito durante 10 segundos, decidí reírme, echarle una foto y avisar a Juan para que me ayudara a meterlo en la bolsa nueva, cosa que logré hacer con una pala de quitar nieve que hay en el cuartito oscuro. Asqueroso.

Tengo que interrumpir la entrada porque acaban de pasar dos cosas en la clase: la primera es que la chica que jugaba al juego de las bolitas se ha pasado al buscaminas; la segunda es que mi compañero de al lado me acaba de invitar a jugar al fútbol mañana y en este momento me siento un chico 'popu'.

Continúo. Esta semana ha acontecido el International Day en mi universidad. ¿Y eso qué es? En pocas palabras: la ocasión perfecta para ponerte literalmente hasta el culo de comida de otros países y de paso bajar la comida con unos cuantos vasos de sangría 'tipical spanish'.

Por cierto, en casa todo bien. Salvo por Minka, que está realmente constipada. Eso le pasa por intentar escaparse de casa con el frío que hace ahí fuera. Espero que aprenda. Ahora no para de estornudar y vaga por la casa como una hipocondríaca tratando de maullar pero sin conseguirlo, emitiendo maullidos como haría el mismísimo Joaquín Sabina.

Más cositas, esta semana he acudido a dos fiestas. El jueves salí y coincidí con mis compis alemanes de clase. Me lo pasé tetilla. Y el sábado salí a una fiesta en una universidad, donde pude ver a la gente más acabada jamás vista. Tíos y tías durmiendo en el suelo (alguno incluso se había meado encima), gente cayéndose al suelo desde una tarima, tíos semidesnudos montando a caballito, otros intentando colgarse de canastas... imaginaos una discoteca llena de Dimitris, una locura.

Por último os cuento noticias breves de la semana y termino con un consejo:

  • sigo sin perfeccionar mis huevos fritos, aunque prometo a mis seguidores que lo seguiré intentando;
  • he encontrado el calcetín que perdí hace semanas. Ha aparecido en la última lavadora que puse. Parece que no han aceptado su entrada en el reino de los calcetines perdidos y ahora es un alma perdida y atrapada en nuestro mundo;
  • desgraciadamente, esta semana se me ha comparado físicamente con Sergio Busquets, ¿por qué? ¡Todos sabemos que tengo un aire a Ezequiel Garay!
  • he descubierto que los fines de semana en su tiempo libre, mi vecina se dedica a cantar ópera. Iré anotando sus progresos...

Y ahora, el consejo de amigo que os prometí: no intentéis cocinar y bailar al mismo tiempo. Vuestros espaguetis pueden acabar besando el suelo de vuestras cocinas.

Disfrutad del temporal que nos acecha allá donde estéis. Aquí han empezado a caer los primeros copos...

Pd: estoy muerto de ganas de que llegue el Clásico, el primero de la era post Guti, post Raúl y post Ibrahimovic... lo iré a ver a la residencia Galileo, ya os contaré.

¡Un bratso!
  

lunes, 22 de noviembre de 2010

La nueva Minka, Harry en inglés, Hannover y más pifias mentales...

Han pasado muchas cosas en mi vida desde la última entrada del blog, pero la más importante es que hoy hace 2 meses que llegué a Bremen y sigo vivo. Mi cabeza va in crescendo, no de conocimientos (que también, mamá) sino de pelo. Ahora me doy cuenta de lo que más echo de menos de España: la familia, mi novia, los amigos, el jamón y a mi peluquera. Pero bueno, peluca de Paul McCartney aparte, centrémonos en estas semanas... Un segundo, antes de empezar, tras aquel momento sublime en Roma cuando descubrí la señal de 'Area pedonale', he logrado superarme. Lo tenía mucho más cerca y no le había prestado atención... En Bremen hay un restaurante llamado 'Delano'. Os dejo con un momento remember, tenía que hacerlo.

He recibido una nueva visita, ha venido mi novia a vigilar si todo sigue en orden por Bremen y a averiguar si seguía teniendo cuerpo o simplemente era una de esas cabezas de Futurama, pues cada vez que me ve en el Skype solo me ve de cuello para arriba. No ha habido sorpresas, salvo que he tenido que ir a ver Harry Potter al cine, en versión original, por supuesto. ¿La película? Muy bien, no me quejo. Pero sí lo hago de aquel día en general, y me explico por puntos:

1) Llegamos al cine a eso de las 4 a comprar las entradas, la cajera saca un puñal de grandes dimensiones y lo inserta directamente en nuestras zonas renales. Acto seguido se queda con 9 euros por cada entrada. A todo esto, el mapa de la sala lo tenía al revés y al elegir sitio efectivamente lo hago al revés y acabamos sentándonos en la 3ª línea (clickea aquí para ver mi pensamiento en aquel momento).

2) Tras dar un paseo por el Bürgerpark para recuperarnos del susto, volvemos al cine. Entramos en la zona de bebidas sin enseñar a nadie las entradas, aquí te las pican en la puerta de la sala. Pedimos un menú, el hombre que nos atiende me encañona con una pistola y me roba 8 euros. Llegado el momento de las palomitas, me empieza a hablar en alemán, intuyo que tengo que elegir entre dulces o saladas. Mi reacción: "sí, esas mismas". Según me las da, son dulces. Sandra me lo hace saber y entonces suelto una de las respuestas más idiotas de la historia de la humanidad: "¡Joé, yo es que creía que las palomitas dulces solo eran de colores!". Lo peor es que lo dije con decisión. Lamentable.

3) Tras sentarnos en la 3ª fila, me siento como un idiota hasta 10 minutos después, cuando otro señor se sienta en la 2ª, algo que sinceramente me alivió. Entonces comienzan los anuncios, que no los trailers. Hubo uno que se llevó la palma: te enseñaban a toser correctamente. Sí, amigos, un minuto de spot para saber toser correctamente.

4) Cuando llevamos 20 minutos de anuncios estúpidos de televisión, comienzan los trailers. La película debía empezar a las 19.30 y no lo hizo hasta las 20.00. Estábamos sintonizando ya con TVE para ver las campanadas con Ramontxu cuando por fin aparece el símbolo de Warner Bros... ¡pero de repente aparece un idiota llamado Otto que publicita su estúpida película!


5) Y por fin empieza Harry Potter, media hora después de lo esperado... Y ahí es cuando piensas: "Hostia, pues sí que es jodido ver una peli en versión original sin subtítulos". Aunque siempre había un sector del cine entendido que pillaba todas las gracias de la película al vuelo, concretamente el fondo noreste, siempre se oían las mismas carcajadas. Hubo un par de veces que me reí para no quedar demasiado mal... aunque lo que realmente quería hacer era esto.

Además de esta sucesión de malentendidos en el cine de Bremen, he de contaros que esta semana ha sucedido un drama en casa: Minka se ha escapado... ¡pero ya está en casa! ¡Y viva! Por lo visto pasó 2 noches en la perrera, o lo que es lo mismo, la cárcel. Ha vuelto a casa lesbiana perdida, llena de tatuajes, con un pañuelo en la cabeza y unas patas más fortalecidas... la cárcel la ha cambiado, ahora es un gato rebelde. Es más, hace 10 minutos ha entrado mi casero preguntándome por ella, si se ha vuelto a escapar esto es para mear y no echar gota...

Más cositas, paseando con Sandra hacia el cine el otro día me di cuenta de que hay una parte del muro de Berlín expuesto cerca de la estación central. Estoy muy puesto en mi ciudad, eh... ¬¬' Según la cara de Sandra, a ella le sorprendió mucho más que a mí (aquí arriba tenéis el momento remember). Por cierto, la semana que viene comienza el mercado navideño aquí en Bremen y empiezan a iluminar toda la ciudad. Ya subiré fotos...


El jueves salimos por el cumpleaños del grandísimo Pablo. La noche estuvo genial, creo, no puedo recordar nada, la verdad, solo que estuve con 'El Hombre del Revés'.

También hemos estado en Hannover, donde nos hicimos una foto-tuenti con el ayuntamiento, que realmente lo peta. También nos quedamos con las ganas de alquilar un coche barril, en el que pudiéramos pedalear por la ciudad y bebernos unas buenas cervezacas. Pero hay que decir que lo que verdaderamente nos volvía locos era ir a ver el barrio rojo de Hannover, y acabamos en una zona donde hasta Chuck Norris se habría cambiado de acera. Por cierto, la pregunta que usábamos para llegar al sitio era: "Perdón, ¿sabe dónde está el barrio rojo?", acompañado de un: "Sí, hombre, donde están las putas, sí, ahí en los escaparates y eso, donde están las putas apoyadas, in the windows, ¿sabes?" Como siempre, dejando a los españoles en lo más alto del pabellón. Debimos habernos hecho pasar por italianos...

Para ir cerrando, os hago un apunte sobre la última foto. Me la hice con una señal que hay por Bremen y que dice algo así como 'prohibido usar pistolas, bates o navajas entre las 8 de la tarde y las 8 de la mañana. Según nos han explicado, significa que entre esas horas hay más seguridad, y que si llevas algún arma que la guardes por si te pilla la policía. Sin comentarios (cómo me gusta usar este vídeo)...

Se os sigue echando mucho de menos... Por cierto, no dejéis de echarle un vistazo al nuevo blog de mi coleguilla Morquecho, lo tenéis de enlace junto a los vídeos de Purpur... ¡Arriba Gilisport!

¡Un bratso!
   

martes, 9 de noviembre de 2010

¡Con un par de huevos!

Lo primero es lo primero, hoy es 9 de noviembre de 2010 y Belén Esteban cumple 37 años. Supongo que España entera estará colapsada por la noticia. Yo me he enterado gracias a este enlace de Cuanta Razón. Gracias por hacer que el día de hoy no pase desapercibido para mí.

Bueno, ahora al lío... ¡Hoy he hecho mi primer par de huevos fritos! (Aunque el segundo se ha reventado...) Todo ha sido inesperado, yo llegaba a casa para comer, tenía previsto comerme un filete de pollo empanado (solo tenía que freírlo dos minutillos y hecho) pero se me ha ido la cabeza. He pensado "¿Qué querría Belén Esteban por su cumpleaños?", y pronto me ha venido a la cabeza, "una nariz". "No, Jaime, una nariz no puedes, pero creo que estaría muy orgullosa si el día de su 37 cumpleaños hicieras los primeros huevos fritos de tu vida". Y allá que me he puesto.

Estaba tan orgulloso de la hazaña que he ido a por el móvil para grabar el momento, pero cuando he visto saltar tanto el aceite me lo he pensado dos veces, yo sé de una que dijo que la lió parda y acabó siendo un fenómeno de Youtube... Pero esto no me ha impedido hacer una foto de mi maravillosa obra de arte, de la cual tengo que decir: "Tenía mejor sabor que pinta... y tenía más hambre que el perro de un ciego".

Bueno, damos un salto unos días atrás y vamos con la versión figurada del título de la entrada. Vaya par de huevos tuvieron esos valientes que se lanzaron a la laguna de la Residencia Galileo de madrugada, lloviendo y con un frío del carajo. Ellos saben quienes son y que tienen todos mis respetos desde aquel fabuloso momento. Menudo espectáculo. La mejor manera de celebrar un cumpleaños, ¿eh, Javi? Grandes.

Más cositas, me he movido de Bremen esta semana. El primer destino fue Oldemburgo, y para ser la primera vez que cogí un tren en Alemania, la lié. Con mi abono de transportes puedo coger cierto tipo de trenes, en otras palabras, los de los plebeyos. Eso yo no lo sabía, o me salté ese capítulo de Barrio Sésamo... Pues el caso es que nos montamos en un vagón parecido a los del AVE, con asientos enormes y reclinables... Pensé: "joder, menudo nivel que tienen los alemanes, me siento un marqués, voy a poner aquí la Coca-cola... anda, si ni siquiera se mueve el líquido, increíble, chapeau". A los 5 minutos pasa una revisora, y como si de un famoso VIP se tratase, saqué mi Semesterticket sin mirarla siquiera. Ella no se movió del sitio, es más, nos invitó a abandonar el tren en la próxima parada y coger uno acorde a nuestro abono... Todo hay que decirlo, debió quedárseme una cara tan de gilipollas que no nos puso ni multa.

Con la lección aprendida, también he viajado a otros dos sitios: Bremerhaven y Hamburgo. En el primero vi un edificio en forma de barco realmente precioso, amén de ver el Mar del Norte. Por lo visto Bremerhaven tiene el puerto pesquero más grande de Europa según Wikipedia, no digo más... Bueno, a parte tiene un Decathlon, al cual desistimos de ir porque el tiempo nos pisaba los talones y ya nos habíamos perdido en un autobús...

Hamburgo es otra cosa, una ciudad con encanto tomada por Gallardón, llena de obras. Pero muy bonita, con canales, con su barrio lleno de sex shops y salas recreativas... aunque regresé a Bremen con la sensación de no haber recorrido ni siquiera el 10% de la ciudad. Volveré, Hamburgo, volveré.

Por lo demás, no quiero despedir esta entrada sin anunciaros que el otro día lavé unos vaqueros, unos vaqueros que podían andar solos hacia la lavadora ya... También he visto una película americana en versión original doblada en alemán (preocupante que en algunas fases de la peli me enterara más por los subtítulos que por el audio) y he hecho las paces con Minka, a mi manera. Ayer me di cuenta de que se quedó dormida en el recibidor esperando mi llegada, yo lo que hice fue rayarla moviéndole la manta donde estaba acurrucada hasta que me aburrí. Ya sabéis que soy un temerario, un forajido de la ley...

¡Un bratso!
   

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Recién llegado de Roma para convertirme en una estrella

¿Qué tal amigos? Pues nada, he necesitado tan sólo un mes y una semana para convertirme en una estrella de la televisión alemana... que noooo... ¡pero casi! Hoy han venido a mi clase un grupo de periodistas que iban a hacer un reportaje sobre el periodismo en nuestra universidad (o algo así) y han estado grabando en mi aula (mientras hacíamos que trabajábamos), y luego le han hecho una entrevista personal a una compañera. La televisión en cuestión se llama 'NDR' y el programa donde se emitirá es 'ZAPP'. No hay ningún desnudo integral mío durante el reportaje, por lo que no resulta demasiado interesante, ya os contaré si encuentro algún enlace cuando se emita...

Continúo contándoos mis últimos días, que no los he pasado en Bremen sino en la bella Italia. He estado en Roma con Sandra de turisteo. Y allí he logrado abrir mi mente y he tenido tiempo para reflexionar sobre algo: todas las palabras que contienen el término 'pedo' provocan una sensación de bienestar supremo en mi interior, lo cual logro exteriorizar con una risa tonta de entre aproximadamente 5 y 10 minutos, amén de repetir la citada palabra durante los 3 o 4 días siguientes acompañado de una leve sonrisa.

¿Y a qué viene esto? Os cuento. Caminando cerca de Piazza Spagna, una zona de tiendas exclusivas, nos cruzamos con Joan Laporta y su novia de unos 25 años máximo. Como no nos llevamos extremadamente bien, Joan se hizo el loco y no me saludó. Sandra me dijo: "¿Por qué no te haces una foto con él?" A lo que respondí amablemente y como hubiera hecho el mismísimo Bartney Stinson: "bah... por favor...". Moraleja que saco de esta historieta: me alegra muchísimo más la vida y me llena de satisfacción hacerme una foto con una señal que dice 'Area Pedonale' que hacerme una foto con Joan Laporta.

Por supuesto no podían faltar las gracias en esta entrada a Sandra, que ha hecho que coma en 3 días más de lo que he comido en Bremen en un mes: huevos fritos, patatas fritas, ensaladas, filetes de ternera, arroz con rissotto y bacon (o algo así), tortilla de patata, empanada (gracias a las compis de piso, por supuesto). En una palabra: fantabuloso. Os adjunto un momento remember de mi cara de gozo al encontrarme con un menú de dos platos mínimo sobre la mesa.

¿Más anécdotas del viaje? Realmente hay algunas que no puedo contar (aunque son realmente graciosas) y no se trata de más palabras que contengan 'pedo'... Pero bueno, os cuento una que nos hizo gracia a mí y a todos los presentes en aquel momento: en el viaje de ida de Bremen a Milán vi cómo un borracho alemán llegaba corriendo a la última llamada de su vuelo con destino a Múnich. La azafata no paraba de gritarle que se diera prisa (todo esto lo entendí únicamente por el contexto) y el campeón venía con una cerveza en cada mano y haciendo eses. Tras decirle la azafata que con eso no pasaba se lamentó y se terminó las dos botellas en unos 10 segundos. Genio y figura.

Y quiero terminar esta entrada con una historia de terror digna de las fechas en las que nos encontramos (Halloween), aunque me ocurrió dos días después. Fue ayer, concretamente. Estaba tumbado en mi cama con el ordenador en las piernas escuchando la cadena Ser, digo la Cope, que retransmitían el Copenhague-Barcelona, y noté una presencia extraña. Algo se movía a mi izquierda. Giré la cabeza levemente y ví una pelusa que se movía. Enfoqué y vi una araña que se dirigía hacia mí, ¡en mi cama! Y no precisamente de las patilargas asquerosas, sino una araña de verdad. Una araña que la semana pasada se la pasó entera en el techo de mi habitación y la di libertad. Está visto que a las arañas las das una mano y te cogen el brazo... Pues salté como un resorte y tuve 2 segundos para pensar: "Voy corriendo a por la aspiradora o la mato ya mismo con la zapatilla?" El extremo estado de pánico que me envolvía me hizo soltarle 10 zapatillazos consecutivos. Acto seguido la recogí con un folio (jamás la toqué) y a la basura... Todo un héroe. Un héroe que se ha pasado toda la noche como un lemur rezando porque la araña no fuera gitana y me fueran a atacar sus primos en mitad de la noche.

Pues hasta aquí mis historias de esta semana. Sigo teniendo pendiente echarle unas cuantas fotos a mi habitación y comentaros un poco sobre mi humilde morada... Bueno, voy a completar este maravilloso post con un maravilloso vídeo que espero que disfrutéis solos o en compañía.

¡Un bratso!