lunes, 27 de septiembre de 2010

¡Ojo a los inspectores yonkis!

Hoy el gato ha vuelto a hacer de las suyas por la noche. Le encanta ver cómo me levanto por las mañanas y me cago en su progenitora cuando veo que se ha cargado medio royo de papel higiénico y lo ha esparcido por todo el baño. Además, creo que soy el compi de piso idiota de los dos. Seguramente mi compañero se levante antes silenciosamente, eche su meada mañanera y deje el lugar del crimen intacto para que me toque recogerlo a mí. Y ya van dos días seguidos. Hoy he cerrado la puerta del baño por fin, porque estoy llenando la bolsa del papel a un ritmo descabellado a base de papel higiénico y voy a darle que pensar al casero que echo demasiado de menos a mi novia...
 
Por otro lado, tras varios días comentándolo aquí en Bremen, hoy he visto cómo actúan los inspectores del transporte público aquí en Alemania. Hoy he visto, digamos, una redada. Me he quedado a cuadros.

En Bremen estos guardias van vestidos de paisano, y se toman su trabajo muy pero que muy en serio. Porque cuando digo de paisano, quiero decir de yonki. Sí amigos, de yonkis. Como no entendía la conversación, en un principio creía que la mujer les estaba pidiendo un euro para el tranvía a un par de chavales jóvenes. Después ha llegado su camarada (sólo le faltaba una jeringa colgando del brazo, en serio) y le ha debido decir al joven algo así como: "qué pasa jefe, que vengo de Vallecas, a mí tonterías las mínimas, ahora por cafre me vas a pagar una multa, chavalote". Algo así he entendido con mi nivel de alemán A.1.1.

Por cierto, ¿os acordáis de lo que os conté sobre mis sospechas hacia un posible 'Show de Truman'? Pues bien, creo que no voy muy desencaminado. Sin ir más lejor, ayer por la noche me había dejado la bicicleta aparcada en la calle. Entonces decidí salir con el pijama y un abrigo a meterla en el cuarto de las bicis (por aquello que os conté de que se estilan los hurtos de bicis en Bremen). Pues según salí de casa, había un coche aparcado en la puerta con un hombre dentro tapado con una manta. O forma parte de los directores del 'Show de Jimmy' o esa noche le contó a su mujer el chiste de "cariño, no es lo que parece".

Bueno, en resumidas cuentas, si te cuelas en el bus o el tranvía de Bremen y ves que suben dos yonkis, bájate en esa parada porque acto seguido te sacarán una cartera con su placa comprada en los chinos y te exigirán que pagues algo así como 40 eurillos.

Por lo demás, el tema por Bremen sigue igual de guay, llevan 2 días seguidos cayendo calabobos. De mañana no pasa, me compro un paraguas. Me he puesto fino al llegar a la Hochschule, que hoy empezaba el curso de idiomas intensivo de 4 días.
Me estoy dando cuenta estos días que mi blog está causando fervor por internet (parece que el trato que hice con cierta mafia rusa rompepiernas está dando sus frutos). Prometo que a partir de ahora pondré más empeño, dejaré de pedirle los textos a Buenafuente y empezaré a escribir yo.

Pd: como no he hecho fotos estos días sobre las curiosidades aquí descritas (a ver cómo amanece mañana el baño y si le puedo hacer una foto a las bromas mañaneras de Mika), os dejo con una ego-foto de mi careto de felicidad en el Weserstadion el otro día y un cochecito muy majo (de pedales) que hay cerca de mi calle.

¡Un bratso!

2 comentarios:

  1. Soy fan de Mika... y no me refiero al del "Relax, take it easy".
    ¡Pequeño demonio gatuno!.

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  2. Este blog y el de Camela estan entre mis preferidos!!! sigue asi canalla!

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